VACUNAS

Autor: Eva Martínez (1)

INTRODUCCIÓN (CDC, 2019)

Un primer paso, es entender que es una vacuna. Pero para ello, hay que entender que es la inmunología.

La inmunología es la habilidad del cuerpo humano para:

  • Tolerar: el material propio del cuerpo
  • Eliminar: el material extraño, foráneo, sustancias denominadas antígenos.

Esta habilidad de discriminación entre lo propio y extraño es la base para protegernos de las enfermedades infecciosas. La inmunidad a un determinado patógeno se refleja normalmente por la presencia de anticuerpos (o inmunoglobulinas) en el organismo. La inmunidad se adquiere generalmente contra un único organismo o un grupo de organismos íntimamente relacionados. Hay dos mecanismos básicos por los que se adquiere inmunidad: activa y pasiva.

  • Inmunidad activa: es la protección que se produce por el propio sistema inmune de la persona. Este tipo de inmunidad normalmente dura años, incluso toda la vida.
  • Inmunidad pasiva: es la protección producida por productos de origen de animal o humano y son transferidos a otro humano, habitualmente mediante una inyección. La inmunidad pasiva, aunque suele proporcionar una protección efectiva, esta disminuye (desaparece) con el tiempo, en semanas o meses.

El sistema inmune, desarrolla una protección frente a los antígenos. Estos antígenos pueden estar presentes en los patógenos vivos o inactivados, pudiendo ser proteínas u otros materiales, como polisacáridos. La base de esa protección es la respuesta inmune, la cual implica la producción de anticuerpos. La protección va a depender de como de efectivos son esos antígenos produciendo la respuesta inmune, a más efectividad, mejor respuesta inmune y mejor protección.

TIPOS DE INMUNIDAD (CDC, 2019)

Inmunidad pasiva: Se produce por la transferencia de un anticuerpo producido en un humano o animal a otro. Como se comentaba en el apartado anterior, la protección es temporal. La transferencia transplacentaria es la fuente más importante de inmunidad pasiva durante la infancia. Estos anticuerpos se pueden usar como profilaxis tras la exposición a ciertas enfermedades (como la rabia) o como antitoxina.

Inmunidad activa: se produce tras una respuesta inmune y conlleva la producción de anticuerpos generados por el propio organismo. Como hemos visto puede durar años, incluso toda la vida, ya que se produce una memoria inmunológica. La inmunidad activa se obtiene tras la exposición al antígeno, por la infección del patógeno o a través del uso de vacunas.

DEFINICIÓN DE VACUNA Y TIPOS DE VACUNAS

Una vacuna es una sustancia compuesta por patógenos vivos atenuados o inactivados o una fracción de estos, que tiene como objetivo producir una inmunidad activa y una memoria inmunológica similar a la natural sin que se produzca riesgo de sufrir la enfermedad (CDC, 2019). Tienen como objetivo ser efectivas en la prevención o reducción de la severidad de una enfermedad infecciosa (WHO, 2020).

Por tanto, existen dos tipos básicos de vacunas (CDC, 2019):

  • Vivas atenuadas
  • Inactivadas

VACUNAS VIVAS ATENUADAS

Son vacunas que contienen el patógeno (virus o bacteria) completo el cual ha sido “debilitado” (Group, 2020). Se obtienen modificando el virus o bacterias (wild type) en un laboratorio, el cual retienen la capacidad de replicarse (crecer), pero no de producir la enfermedad. Normalmente esto se consigue mediante repetición de cultivos. Como el virus o la bacteria se va a replicar en el interior de la persona vacunada, sólo es necesaria una pequeña dosis para estimular la respuesta inmune. Cualquier condición (calor, luz, etc.) que dañe a los organismos de la vacuna o interfiera en su replicación en el cuerpo (anticuerpos circulantes: anticuerpos transplacentarios, anticuerpos procedentes de transfusiones, etc.) puede hacer que la vacuna sea inefectiva.

Normalmente no causan enfermedad, si lo hacen es mucho menos severa y se considera como un efecto adverso. Sólo producen reacciones fatales en personas con inmunodeficiencia, debido a que se produzca un crecimiento incontrolado del virus o la bacteria.

Producen una respuesta inmune virtualmente idéntica a la infección natural, por lo que normalmente sólo es necesaria una dosis, excepto cuando se administran oralmente (CDC, 2019).

VACUNAS INACTIVADAS

Son vacunas que contienen el patógeno completo muerto o pequeñas partes de este, como proteínas o polisacáridos (azúcares). Producen una respuesta inmune menos efectiva que las vacunas vivas atenuadas, por lo que normalmente necesitan dosis de refuerzo y/o varias dosis. Para mejorar la respuesta inmune suelen añadirse sustancias adyuvantes. Como resultado, pueden producirse reacciones locales (Group, 2020). En este tipo de vacunas no se produce replicación del patógeno, se administran mediante inyección y no pueden causar enfermedad, ni si quiera en personas inmunodeprimidas. Los anticuerpos circulantes tienen menos afinidad por estos componentes que por los patógenos vivos (CDC, 2019).

Vacunas muertas

Son vacunas que contienen el patógeno completo muerto (Group, 2020). Los virus o bacterias crecen en un medio de cultivo y posteriormente son inactivados química (formaldehído) o físicamente (calor) (CDC, 2019). Actualmente sólo están disponibles para virus (CDC, 2019).

Vacunas subunitarias o acelulares

Son vacunas que no contienen el patógeno completo, si no que contiene proteínas o polisacáridos purificados. Existen varios tipos de subunitarias:

  • Vacunas conjugadas. Son vacunas de polisacáridos que se unen a otra sustancia para potenciar la respuesta inmune, como por ejemplo a la proteína toxoide de la difteria o tétanos. El sistema inmune reconoce a esa proteína fácilmente y ayuda a generar una respuesta inmune más fuerte frente al polisacárido (Group, 2020).
  • Vacunas recombinantes. Son vacunas que usan bacterias o levaduras para producir la vacuna. Se trata de coger un trozo de DNA del patógeno e insertarlo en otra bacteria o levadura, produciendo proteínas o polisacáridos del patógeno, los cuales se purifican y se usan como ingrediente de la vacuna (Group, 2020).
Vacunas toxoides

Son vacunas hechas con sustancias que “imitan” las toxinas producidas por bacterias. Producen una fuerte respuesta inmune (Group, 2020).

REFERENCIAS

CDC. (15 de Abril de 2019). Principles of Vaccination. Obtenido de Center for Disease Control and Prevention: https://www.cdc.gov/vaccines/pubs/pinkbook/downloads/prinvac.pdf

Group, O. V. (27 de Abril de 2020). Types of Vaccine. Obtenido de Vaccine Knowledge Project: https://vk.ovg.ox.ac.uk/vk/types-of-vaccine

WHO. (27 de Abril de 2020). Wold Health Organization. Obtenido de Vaccine Safety Basics: https://vaccine-safety-training.org/types-of-vaccine-overview.html

1) Graduada en Biología y Máster en Microbiología por la Universidad Autónoma de Madrid.

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